Justicia y responsabilidad social

Una cosa es reclamar ideales humanitarios con entusiasmo y otra muy distinta es actuar todos los días en el trabajo de manera tal que se respeten los derechos de nuestros iguales, sea cual sea su nacionalidad o lugar de origen. TARGA ha destacado siempre por cumplir estas normas, y desde 2009 es miembro de " Business Social Compliance Initiative" (BSCI), una organización sin ánimo de lucro fundada en Bruselas en el año 2002 por empresas líderes y por la " Foreign Trade Association" (FTA). El objetivo primordial de la FTA es garantizar y seguir mejorando la conducta social responsable en las cadenas de suministro mundial de las empresas europeas. Para ello se aplica el denominado «Código de conducta BSCI», cuyos requisitos están basados en la Declaración de Derechos Humanos de la ONU, los convenios de la " Organización Internacional del Trabajo" (OIT), las convenciones de la ONU sobre los derechos del niño así como sobre la eliminación de cualquier tipo de discriminación contra la mujer, el Pacto Global de las Naciones Unidas y las directrices de la OCDE para empresas multinacionales. El código de conducta hace referencia al cumplimiento de leyes, la libertad de asociación, el derecho a las negociaciones colectivas y la prohibición de la discriminación. Además, las directrices incluyen importantes aspectos, como por ejemplo el salario justo, la jornada laboral, la salud y la seguridad en el puesto de trabajo, la prohibición del trabajo infantil, la prohibición del trabajo forzado y las medidas disciplinarias, cuestiones medioambientales y de seguridad y el sistema de gestión. Con la firma del código de conducta, los proveedores se comprometen a cumplir estos requisitos. Y eso es exactamente lo que nosotros hacemos.